La
adolescencia es una edad llena de cambios rápidos en su estado emocional; el
mal genio y una gran necesidad por la privacidad, y con tendencia a ser
temperamentales.
Los
niños pequeños no pueden pensar demasiado en el futuro, pero los adolescentes
sí pueden y suelen hacerlo con frecuencia, la cual cosa hace que se preocupen
por el futuro. Durante esta etapa algunos podrían preocuparse excesivamente de:
·
su
rendimiento en la escuela
·
su apariencia,
su desarrollo físico y su popularidad
·
la
posibilidad de que uno de sus padres fallezca
·
ser
hostigados en la escuela
·
la violencia
escolar
·
no tener
amigos
·
las drogas y
el alcohol
·
hambre y
pobreza en el país
·
fracaso en
obtener empleo
·
el divorcio
de sus padres
·
la muerte
En los adolescentes,
los cambios físicos y emocionales son drásticos, pero también suelen ser muy
sensibles sobre sí mismos. Sus emociones a veces parecen exageradas. Sus
acciones son inconsistentes. Es normal que los adolescentes cambien
repentinamente de estado emocional, entre la felicidad y la tristeza, entre
sentirse inteligentes o estúpidos.
Como explica Carol Bleifield, una consejera escolar
de nivel secundario en Wisconsin, "De
momento quieren que se les trate y les cuide como a un niño pequeño. Pero cinco
minutos más tarde quieren que los adultos se alejen de ellos, diciendo, 'Déjame
hacerlo sólo'". Puede ser beneficioso si se les ayuda a comprender que
están atravesando una etapa con muchos y grandes cambios, cambios que no
siempre parecen resultar en el progreso.
Exploran varias
formas de expresar sus emociones. Por ejemplo, un joven que anteriormente
saludaba a sus amigos y visitas con abrazos afectuosos, puede de repente
cambiar a un adolescente que saluda con el más leve reconocimiento. Algo
similar ocurre con los abrazos y besos que antes expresaban su amor por sus
padres, ahora se convierten en un alejamiento y una expresión de: "Ya déjame, mamá". Es importante
recordar que estos son cambios a las formas en que ellos expresan sus
sentimientos, y no cambios a los sentimientos
en sí por sus amigos, sus padres y otros familiares.
Sólo se debe estar
pendiente de si muestran señas de cambios emocionales excesivos o bien, períodos
de tristeza de larga duración. Estas señales pueden indicar problemas
emocionales severos, y se deberá intervenir y actuar ante ello.
Interesante articulo sobre la etapa de la adolescencia, en la que los sentimientos fluyen en los adolescentes con una fuerza y una variabilidad extraordinarias. La adolescencia es la edad de los grandes ánimos y de los grandes desánimos, de los grandes ideales y de los grandes escepticismos. Una etapa en la que emerge quizá una imagen propia inflexible y contradictoria, con frecuentes dudas y largas y difíciles batallas interiores.
ResponderEliminar